¿Qué elegirías que no hayan elegido? ¿Qué empezarías? ¿Qué historia contarías? ¿Qué huellas dejarías? ¿Qué lugar deshabitado habitarías? ¿Qué inventarías?
Tú, como alguien, ¿qué dejas en el mundo que sea tuyo?
Es como si fuera más sencillo responder en condicional que en futuro, sin anticipar, por si acaso.
Supongo que me aterroriza el olvido. Mi ego ha emergido de las entrañas. El hecho de haber estado y de no haber sido, de que nadie piense en mí como alguien que hizo algo cuando me muera, y no sólo cuando me muera, sino muchos años después. Me asusta pensar que estoy aquí rellenando un espacio que alguien dejó para que cumpliera unas metas determinadas en un lugar determinado. Me acojona ser el producto de un sistema y no tener capacidad para decidir, por mucho que me crea con el derecho a hacerlo.
Es diferente. Lo de creer tener y tener, digo. Tener es un hecho, no un planteamiento ni una idea filosófica. Yo tengo libertad, por lo que puedo DEMOSTRAR que soy libre y que siempre lo he sido. Ahora, somos libres, pero no tenemos libertad y nuestra decisión, la nuestra de verdad, depende de eso. ¿Qué quieres ser?
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